El equipo masculino de Gran Bretaña (GBR), se ha vuelto a hacer con el mando de la persecución por equipos Río 2016, uno de sus puntales es Wiggins, pero lo fundamental de su mejor registro en las series clasificatorias no es solamente la participación de Wiggins. En realidad lo que marca la diferencia con Dinamarca (DEN) es la estrategia seguida por los técnicos a la hora de establecer el orden de los ciclistas y cuánto va a durar su relevo.
Vamos a hacer el análisis de la persecución por equipos Río 2016 masculina comparando los dos mejores registros en la jornada de ayer para que se remarque esta diferencia, ya que utilizaron estrategias completamente diferentes. Mediante un análisis muy básico, contando el número de relevos que da cada equipo, podemos observar que GBR da solo 9 relevos en total, por 12 de DEN, esto supone una ventaja para GBR de 3 bicicletas sobre DEN, solo con el número de relevos de menos que ha dado un equipo respecto al otro.
Lo importante para dar el menor número de relevos es la colocación de los ciclistas. El equipo inglés puso a Wiggins en cuarto lugar con el fin de buscar una posición más cómoda que le permita dar los relevos más largos. Clancy, el ciclista que arranca, es el que más cortos da los relevos, dado que es uno de los que más se desgasta en la salida, Burke el segundo relevista, da los relevos de vuelta, salvo su último relevo que lo hace de vuelta y media, Dollu tercer ciclista, hace relevo de dos vueltas en su primer relevo, lo que permite que Wiggins no haga su primer relevo hasta la quinta vuelta, pudiendo hacer dos vueltas y media, estrategia fundamental para dar menos relevos. Los siguientes relevos de Dollu y Wiggins (tercero y cuarto), son de dos vueltas. Que Wiggins se retire del equipo a falta de 3 vueltas y media para el final, no tiene absolutamente ninguna repercusión significativa en el resultado final del equipo, ya que él no debía volver a intervenir en ningún otro relevo.
La diferencia con DEN es que, obviamente no tienen ciclistas con el talento de Wiggins y Dollu, sin desmerecer para nada al equipo de DEN que son unos superclases. Pero como el equipo está más compensado, los relevos deben ser más igualados, haciendo todos los relevos a vuelta salvo en el último kilómetro. A parte su segundo hombre se retira en la décima vuelta y el cuarto solo es capaz de dar un relevo de media vuelta en su último relevo.
Entender estas estrategias que se producen en la persecución por equipos, es lo que le da emoción a la prueba, ya que el simple paso de los tiempos, observando qué equipo va delante es algo bastante básico y elemental. Si el público entendiera estas circunstancias se valoraría mucho más el ciclismo en pista, pero para ello hay que esforzarse un poco más a nivel de comprensión. Los entrenadores de persecución por equipos, no solo deben entender estas tácticas, sino saber decidir qué estrategia se ajusta más a las características de los ciclistas que disponen para participar en cada prueba y esa es la diferencia más grande entre las grandes selecciones y las mediocres.
Esta tarde se disputa la primera ronda y las finales, veremos quién se lleva el tan preciado oro olímpico.
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